lunes, 25 de junio de 2018

Novela Crimen, venganza y expiación

Los admiradores y amantes de la literatura nos esforzamos por conocer bien a los clásicos, y a otros modelos contemporáneos que pueden aportar ideas y frescura a nuestra actividad.

Además de esa vertiente de disfrute literario y aprendizaje, los aficionados nos atrevemos también a hacer nuestras propias contribuciones, y esto es así en los campos de la narración o de la poesía. Afortunadamente, tal actividad creativa está hoy muy extendida y todo el mundo puede participar. Como dijo Picasso, la creación no debe ser exclusiva de los grandes artistas, sino que hay que animar a todo el mundo a expresarse. En un sentido más profundo, escribir, pintar, cantar, hacer música, bailar, cocinar, etcétera, pueden considerarse contribuciones a la Creación, que por esencia es obra de la Naturaleza.

Ahora bien, un admirador y amante de la literatura no encuentra siempre la oportunidad de editar una obra antigua. En mi caso, la fortuna ha querido que pueda realizar esta labor con la novela de José María Martínez Iñiguez, Crimen, venganza y expiación, publicada en Madrid en 1863, y después olvidada. Es para mi un honor que quiero compartir con todos.

Las circunstancias de aparición de esta novela están explicadas en el nuevo blog Yumiella Cultura, que comparto con María Ortega. Al dar a la luz pública una versión adaptada de ese relato extraordinario, estoy recuperando para todo el mundo el placer del conocimiento y de la lectura de una interesante obra del siglo XIX, poco conocida hasta ahora. Que disfruten la novela!

José María Martínez Iñiguez, Crimen venganza y expiación. Edición a cargo de Martín Ortega Carcelén, Madrid 2018. ISBN 978 – 84 – 09 – 02980 – 8 

lunes, 4 de diciembre de 2017

Invocación de la Verdad


¡Oh humanidad, abre los ojos y el entendimiento! ¡Escucha la Verdad! Huye de tu estado animal que bajovive en lo humano, y accede al conocimiento universal. ¡Oh humanidad, súmate a la Creación, y abandona tus feroces tentaciones tan destructivas! Mira lo que ocurre alrededor, admira la gran evolución, admira la vida, admira el milagro del orden frente a la entropía, y contribuye a culminar la obra de la Creación, en un futuro infinito que no conocemos. 
La Verdad resplandece en el universo. Hay que abrir los ojos y la mente para sentirla. La Verdad es sincera y profunda, es decisiva, fuerte, perfecta – se agotan los adjetivos para calificarla. Es una forma de estar con la mente de Dios, aunque solo podamos acercarnos a ese núcleo de la Creación. Compartir la Verdad es un regalo que nos ha hecho este momento de la historia (¡gracias a tantos héroes y sabios!) que debe llenarnos de confianza por conocer lo auténtico, y de alegría.
Pero la Verdad no es fácil ni divertida. El camino que marca la Verdad es duro y lleno de los obstáculos de la responsabilidad. Es un camino de peligros, en el que hay que enfrentar a los inicuos, sus instintos, su egoísmo y sus mentiras. Estos son vulgares y traicioneros, están dispuestos a arrasar y negar, a sacar el máximo provecho para sus zafias pasiones. Los humanos dominados por los instintos son enemigos de la Verdad. Quienes defendemos la Verdad tenemos un trabajo inmenso por delante.
El momento es grave. La Verdad debe triunfar, la Creación debe continuar. Es una lucha formidable. Pero los humanos están en una situación desesperada, ellos mismos han provocado un grado enorme de destrucción alejándose de la Creación. Pueden asolar la vida e incluso perecer. Los instintos y el egoísmo de los inicuos no conocen freno. La Verdad obliga a reconocer y a sentir esos peligros. También obliga a profetizar, enseñar y actuar. Una labor exigente, una entrega vital.

¡Verdad eterna, Unidad del universo, fuerza de la Creación, experiencia única de la Vida, Razón que permites compartir la Verdad, dadnos fuerza para triunfar! ¡Que los sensatos y auténticos sean victoriosos sobre los inicuos! ¡Que la Creación nos acompañe en esta lucha sin par!

lunes, 12 de diciembre de 2016

La música de José de Nebra

La escena clásica en Madrid es un placer de buenos efectos secundarios. Este año hemos podido disfrutar obras extraordinarias y alguna sorpresa remarcable. La sorpresa ha sido la música de José de Nebra, cuya obra Iphigenia en Tracia ha iluminado el Teatro de la Zarzuela. Se trata de una ópera de tema mitológico, con melodías de terciopelo que se transforman fácilmente en fiestas de cohetes y sonrisas. José de Nebra, nacido en Calatayud en 1702, sirvió de organista y compositor en la corte madrileña hasta su muerte en 1768, junto a músicos del calibre de Scarlatti y Boccherini. Algo anterior a Mozart, Nebra es un fenómeno poco conocido. Su música escénica, así como su Requiem para Bárbara de Braganza, son de tal imaginación y calidad que lo hacen el gran compositor español del siglo XVIII. La combinación en su obra entre aires académicos, como los de grandes músicos europeos de su época, y aires populares españoles, convierte a Nebra en un adelantado a la música que vendrá un siglo después. La representación en Madrid de Iphigenia nos permitió descubrir su magnífica obra, dejando de lado, eso sí, el libreto original, más bien malo (Mozart, en cambio, contó con los buenos libretos de Ponte y Schikaneder).

También hemos disfrutado en Madrid La Celestina con José Luis Gómez, genial actor y director que supo transmitir toda la fuerza de una historia tan preñada de vida. La puesta en escena en el Teatro de la Comedia, con llenazo todos los días (después de estar en Abadía), demuestra que la Tragicomedia de Calixto y Melibea (el nombre con el que deberíamos conocer esta obra maestra) debería representarse sin cesar para disfrute de jóvenes y menos jóvenes. Hablando de obras que no deberían bajar de los escenarios, El perro del Hortelano de Lope de Vega es una comedia deliciosa, que también hemos saboreado de nuevo, donde se destaca el papel de la mujer en la sociedad. Teniendo en cuenta los geniales vericuetos de la narración, el realismo en los personajes y el divertido final, esta obra supera sin duda a las más celebradas comedias de Shakespeare (en tragedia el inglés supera a Lope, que tampoco era manco en esto).

En fin, el enorme éxito del ballet Don Quijote, con coreografía de José Carlos Martínez, director de la Compañía Nacional de Danza, estrenado en diciembre de 2015, obligó a una primera gira por España y a una reposición en Madrid a lo largo de diciembre de 2016. El ballet sigue la música del austríaco Ludwig Minkus, desde su primera representación en el Bolshoi en 1869, quien se inspiró en el folklore español con mesura para hacer una obra equilibrada donde puede lucirse la puesta en escena. En la representación de la Compañía Nacional de Danza, el primer y el tercer actos son coloridos y alegres, los cuadros permanecen en la retina. El segundo acto es simplemente inolvidable. Los pasos a dos, la danza de los gitanos, Don Quijote persiguiendo a su Dulcinea ideal en la penumbra entre bailarinas de luz son momentos estelares. ¡Bravo a José Carlos y a todo su elenco!

Estas interpretaciones actuales de obras clásicas confirman que la cultura española está bien viva y puede seguir bebiendo de fuentes que no se agotan, al mismo tiempo que renueva su sangre.

martes, 14 de julio de 2015

Infierno en la tierra

Cuando despertemos de este sueño
que no es sueño sino pesadilla
una quimera tan real
que parece sueño
y así es más triste todavía.
Cuando despertemos de esta noche
encendida en gasolina 
y hallemos en su centro,
sin saberlo, un infierno nuestro.
Cuando el fuego nos abrase por fuera
y todavía más por dentro.
Cuando el sol esté acercándose a la tierra
y no podamos pararlo,
hablar con el, convencerlo.

Cuando los hombres emigren hacia el norte
para encontrar que solo hay otro sur muerto.
Cuando los ricos sean ricos por beber agua.
Cuando el aire se vuelva ceniza y cera.
Cuando los mercaderes sigan gritando:
comprad, gastad y quemad,
destruid el planeta sin dudar,
como si os fuera la vida en ello …
Cuando es así, nos va.

Dónde dirigiremos las quejas?
Organizaremos protestas?
A quién dispararán los cañones?
Qué discursos harán los políticos?
Y los niños, dónde jugarán?
Qué alivio darán las madres?
Quién escuchará nuestros lamentos?
Dónde hallaré, pobre y solo, consuelo
por haber sido tan cobarde?

Todos seremos culpables
y, como culpables,
todos cumpliremos condena
hasta el último día
en la misma cárcel.

martes, 7 de julio de 2015

Comentario a Camino del Aire

Mi novela Camino del Aire sigue recibiendo comentarios. Muchas gracias a los que se interesan por ella, a todos aquellos que la leen, a quienes hacen críticas, que sirven para aprender, y a los que hacen comentarios elogiosos.

Escribir es una tarea difícil pero gratificante. Creo que el escritor tiene que ser fiel a su propio proyecto y darlo a la luz del día por el mero placer de la Creación. Pero siempre se espera contribuir con algo positivo a nuestra cultura y a nuestra sociedad.

La recensión de mi novela que aparece en la web KindleGarten es muy completa y trata aspectos de fondo y de forma. En efecto, Camino del Aire es un libro de aventuras que también hace crítica social. Es un homenaje a los niños en esa edad en que empiezan a ser pequeños adultos responsables. Y es un canto al medio ambiente y a la naturaleza que, desgraciadamente, estamos destruyendo con nuestra soberbia. El autor del comentario ha comprendido que mi relato es algo más que un entretenimiento, quiere ser también una fábula para aprender.

martes, 2 de junio de 2015

Camino del Aire




Acaba de publicarse mi novela Camino del Aire, en la editorial Cuadernos del Laberinto. Muchas gracias a Alicia Garcia Ares, mi editora! En la Feria del Libro de Madrid estare presentando y firmando ejemplares.

La web literaria Conocer al Autor ha preparado este resumen en video del libro.

Camino del Aire es una historia de niños, un relato muy cinematografico, que tiene algo de libro de aventuras y de retrato de nuestra sociedad. Espero lo disfruten!

Texto de la contraportada:

Un grupo de colegiales ha desaparecido sin dejar rastro. La policía inicia una minuciosa investigación que requiere la colaboración inmediata de madres y padres. Pero las horas pasan y los niños no dan señales de vida. Solo el inspector Aparicio parece adivinar las causas de la huida y el lugar hacia donde se encaminan.

Isabel es una niña superdotada que guía el rumbo de sus compañeros. Gracias a su ingenio y a los caprichos del azar, el grupo de colegiales podrá continuar su camino hasta conseguir un sueño.

Camino del aire es una novela alegre y refrescante que habla de las relaciones entre padres e hijos y del futuro. El viaje iniciático de unos niños sirve de trasfondo para hacer un retrato desenfadado de la política y la sociedad.

viernes, 28 de febrero de 2014

El caballero de Olmedo

A veces surge una obra de teatro perfecta, donde todo funciona como la misma naturaleza – o incluso mejor. Los actores disfrutan y el público con ellos, el texto rebosa vida, la historia ensancha nuestro horizonte mental, la música emociona y todo encaja en una realidad onírica pero nuestra, es como un milagro. El espectador afortunado queda sobrecogido, sin palabras, al final del espectáculo. Como decían los americanos, a veces el cine es “bigger than life”, y esto es más potente cuando pasa en el escenario teatral porque la experiencia es cercana, palpable.

Este milagro ha ocurrido en Madrid con El caballerode Olmedo de Lope de Vega, dirigido por un inmenso Lluís Pasqual, en plena madurez creativa. El montaje parte de la cooperación entre la Compañía Nacional de Teatro Clásico y el Teatre Lliure de Barcelona, en sus versiones jóvenes. Y esta es la piedra angular del éxito: el clásico de Lope renace fuerte y renovado gracias a la combinación de actores frescos y jóvenes, llenos de entusiasmo, a los que se suma la sabiduría de algunas contribuciones estelares, como la del propio director, y Carmen Machi y Rosa María Sardá que van a alternarse en el papel de Fabia, la celestina algo bruja. El público que abarrota el Teatro Pavón, sean estudiantes de bachiller o sus abuelas, ríe, llora, se sorprende y aplaude con pasión al final. Ya no quedan entradas. Si todavía no la han visto, recomiendo un viaje al Teatre Lliure de Barcelona donde disfrutarla del 14 de marzo al 13 de abril.

El montaje acierta al mantener a todos los actores en el escenario (que también son espectadores por tanto), con una música flamenca inolvidable, una percusión en directo que realza el drama, y una iluminación sutil que envuelve la tragedia y la sitúa en el país de los sueños vividos. Pero sobre todo la obra triunfa por el magnífico trabajo de los actores. La constelación elegida funciona perfectamente: Francisco Ortiz hace un Don Rodrigo atormentado y despechado con el que nos identificamos a pesar de su vileza, Pol López se transforma en un Tello adorable, amigo fiel no solo del protagonista sino de todos y cada uno de los espectadores, y, last but not least, la pareja estelar, Javier Beltrán y Mima Riera, han conseguido un Don Alonso y Doña Inés tan auténticos y al mismo tiempo tan actuales que seguro quedarán en la historia del teatro como interpretaciones ejemplares y memorables. Son muy jóvenes pero ya maestros. Tras disfrutar la obra, asalta el deseo de ver perpetuado este trabajo en cine. ¿No merece la pena intentar una gran producción de este clásico sublime después de saborear la exquisitez y la finura de este montaje?